25 nov 2010

Agresividad masculina y educación


Hoy, 25 de noviembre, es el día internacional contra la violencia de género. Durante este 2010, 64 han sido las mujeres asesinadas por hombres. Voy a hacer una breve reflexión sobre las bases biológicas de esta agresividad masculina. Entre los mamíferos, 4 son los factores que parecen explicar este hecho:
  1. Nivel de testosterona: esta hormona sexual masculina, parece estar relacionada claramente con los niveles de agresividad. Cuanto mayor es su nivel en sangre, mayor es la agresividad. También esto explicaría que las hembras de hiena, que producen más testosterona, sean más agresivas que los machos. Y otro ejemplo, lo veríamos en las situaciones de stress, ya que se inhibe la producción de testosterona, observándose, en muchos experimentos, que los hombres estresados son menos agresivos.
  2. Jerarquía social: los machos que ocupan posición dominante dentro de un grupo social, tienden a ser más agresivos y más competitivos, que los que ocupan una escala más baja. Por lo tanto, aquellos hombres que ven a la mujer como un ser inferior y posesión suya, muestran comportamientos más agresivos.
  3. Experiencias previas: aquellos machos que llevan años participando en peleas con otros machos (por el liderazgo, alimento, hembras, territorio, etc) y, que han perdido alguna vez, tienden a medir y controlar más su agresividad. Por eso, los individuos jóvenes, tienden a manifestar mayor pérdida de control y agresividad (por inmadurez e inexperiencia) que los individuos adultos.
  4. Anatomía del cerebro: investigaciones neurológicas han demostrado que la zona del cerebro que se ocupa de controlar la agresividad y el comportamiento es más grande en las mujeres que en los hombres. Esto provoca que los hombres presenten menor capacidad en controlar su agresividad y los comportamientos peligrosos generados por el comportamiento impulsivo.
Además de estos 4 factores, en el ser humano aparece un quinto elemento: la educación en las emociones. Durante mucho tiempo, a los hombres se les ha educado en la inhibición de las emociones en público. Un hombre llorando, denotaba un signo de debilidad y de falta de hombría (creo que hoy en día se les sigue educando igual a los hombres). Con ello hemos conseguido que los hombres pierdan más fácilmente el control y se vuelvan violentos, tanto física como psicológicamente.
Para mi, esto denota una necesidad de paliar un profundo sentimiento de inferioridad frente a las mujeres. Es evidente que la naturaleza ha escogido el modelo femenino como el más idóneo. No hemos de olvidar, que en las primeras semanas, todos los embriones son femeninos y, sólo los que portan los cromosomas XY, varían posteriormente hacia el camino masculino. Y qué decir de la mayor capacidad de supervivencia.
Hemos de apostar por tanto en la educación como la mejor herramienta para combatir esta lacra de nuestra sociedad.

2 comentarios:

Concha dijo...

Jeje, es muy curioso. Creo que hay una especie de determinismo (¿biológico?, ¿cultural?)por el que los biólogos tratan de explican la violencia de los hombres hacia las mujeres, desde presupuestos biológicos y los filósofos, sociólogos, psicólogos, la explican desde razones culturales. Es difícil desentrañar las claves pero, en cualquier caso, estoy de acuerdo en que los seres humanos tenemos la posibilidad de "sobreponernos" a algunos de nuestros condicionantes biológicos. Así que hay que educar para que sea efectivamente posible.

Peter Canthropus dijo...

Totalmente de acuerdo Concha